Dormida

Sigo quedándome dormida por doquier,
me duele mi estómago. mi espalda,
mis huesos de las piernas y los brazos,
me duele poco la cabeza realmente hoy.

EStoy mareada cuando me agacho,
cuando miro hacia al cielo,
cuando hago un esfuerzo,
cuando no he tomado agua.

Decido hidratarme y empiezo a sentirme bien,
pero después todo eso empieza a convertirse,
en un dolor de pecho y esófago que no se
con qué sosegar, aunque ya se que medicina
necesito, si me la tomo, mi riñón lo resiente.

Otro día más como el de hoy me recuerda,
porque no me dan ganas de elaborar un
plan de vida, porque sé que es un sueño,
porque no estoy del todo segura que
logre cumplir 30.

Me autocompadezco lo sé,
pero estoy tan cansada del dolor físico,
y emocional que preferiría ponerle fin,
aún así sigo lidiando con el respeto
por la vida que siento gracias a mi mago.